Saberes locales en el Valle de El Bolsón y los desafíos del Cambio Climático

 

El cambio climático es un desafío global que nos concierne a todos. Por ello, un grupo de investigadoras pertenecientes al Colectivo Interdisciplinario e Intercultural de los Valles Altos Catamarqueños (CIIVAC) -coordinado por la directora del ISES, la Dra. Alejandra Korstanje- llevó adelante un trabajo con pobladores de Barranca Larga, depto. Belén, Catamarca, para conocer sus percepciones, saberes y preocupaciones acerca del lugar en el que viven y los cambios que identifican en términos ambientales.

Las actividades se llevaron a cabo en el marco de dos proyectos: "Territorios Vividos: abriendo pasos para la sustentabilidad de las comunidades y su patrimonio cultural-natural en los Andes", dirigido por Alejandra Kosrtanje y Marisa Lázzari, y “Evolución ambiental y antropización del paisaje bases para la gestión de riesgos en dos localidades de la provincia de Catamarca”, dirigido por Ana Soledad Meléndez. Ambos estuvieron enfocados en la generación de sistemas de datos sobre el uso antiguo de la tierra y de la gestión de riesgos tanto en el pasado como en el presente.

 

Las acciones estuvieron orientadas a la realización de entrevistas abiertas y observaciones junto con pobladores vinculados al sector productivo (agrícola y ganadero) durante el año 2020 y 2021. El trabajo se realizó en forma intermitente debido a las medidas de aislamiento por la pandemia de COVID 19 y fue retomado para la elaboración de un Informe de Mapeo Comunitario sobre la temática.

 

Sobre las entrevistas

Los resultados de las entrevistas pueden agruparse en tres ejes fundamentales:

Con relación al primer eje “la falta de agua potable y de riego en el valle”, pobladores de la zona recordaron que antes, aún cuando había épocas de sequía, contaban con una mayor disponibilidad de agua en los ríos principales. Una primera respuesta a estos cambios, podría estar vinculada a las transformaciones ocurridas en el paisaje, fundamentalmente desde el surgimiento de zonas urbanas cerca de los caminos principales y los cambios de producción y de consumo durante las últimas décadas.

 

 

Las y los pobladores también señalaron que, en relación al segundo eje “preocupación por la pérdida de conocimientos agrarios tradicionales”, antes -hace dos décadas aproximadamente- existía una mayor producción local de alimentos y, por lo tanto, dependían menos de los productos que llegan desde afuera de la mano de comerciantes. Incluso, reconocen que fue durante el aislamiento producido en la pandemia, cuando la movilidad entre las diferentes localidades se encontraba reducida, que quedó evidenciada la dependencia actual de los pobladores respecto a ciertos recursos alimenticios básicos que llegan desde otros lugares, en especial frutas, verduras, productos procesados y de farmacia. Estas reflexiones llevaron a las integrantes del CIIVAC a destacar la relevancia de los conocimientos agrarios basados en técnicas sostenibles y sustentables que garanticen la soberanía alimentaria de las poblaciones locales, y a detenerse en el estudio de ellos.

 

 

Sobre el último eje, identificado como “el miedo por la falta de respeto a la naturaleza”, pobladores de El Bolsón relacionaron la pérdida de conocimientos ancestrales a los cambios en la forma en la que la sociedad se vincula con la Tierra. Si el respeto a la Tierra y el culto a la Pachamama es una actividad común entre los pobladores, ellos identifican que, cada vez más, prevalecen los intereses económicos por sobre el valor y respeto al medio ambiente, ocurriendo deforestaciones, uso de agroquímicos, prácticas extractivas irresponsables, como la mega-minería, que no respetan los ciclos naturales. Otro problema ambiental identificado es el movimiento de tierras producido en la Ruta Provincial N.º 43, lo que ha generado impactos negativos entre quienes viven cerca de la ruta (problemas que surgieron por la falta de estudios de impacto ambiental previos). Sin embargo, las personas entrevistadas también destacan algunos trabajos recientes que se están llevando a cabo en el lugar, como la construcción de puentes sobre el Río El Bolsón y el Río Cura Quebrada, que han generado ingresos en el sector laboral, gastronómico y de alquileres de viviendas, y favorecido la conexión entre los pueblos. Esto lleva a la reflexión de la población local sobre la necesidad de armonizar las actividades que ayudan al crecimiento del pueblo, con los saberes locales, los lazos con la tierra y el respeto por la naturaleza.

 

El equipo asocia este último eje a la crisis climática y ambiental actual, que representa una preocupación global y tiene como origen las prácticas extractivas y destructivas sobre el medio ambiente. El aumento desmedido de la explotación de recursos naturales, la deforestación indiscriminada y la emisión de gases de efecto invernadero han contribuido al calentamiento global y al cambio climático y han puesto en riesgo la sostenibilidad de los recursos naturales fundamentales para la vida en nuestro planeta.

 

Reflexiones finales

Con relación a lo recabado en entrevistas, conversaciones y observaciones, las integrantes del CIIVAC advierten sobre la  crisis climática y ambiental actual, cuyos efectos son hoy visibles en zonas rurales alejadas como lo es la zona de Barranca Larga, y son percibidos y analizados por su población. La toma de conciencia de la interconexión entre las acciones humanas y el ambiente, y la búsqueda de soluciones sostenibles que preserven y restauren la salud del entorno natural resultan cruciales en este sentido. La adopción de prácticas más respetuosas con la naturaleza y el fomento de una economía más sustentable, afirman las investigadoras, permitirán mitigar los impactos del cambio climático y proteger el patrimonio cultural-natural de las comunidades rurales, campesinas e indígenas quienes son más vulnerables a sus efectos. Aprender de las prácticas sostenibles que estos grupos han desarrollado  a lo largo del tiempo es crucial para diseñar estrategias colectivas tendientes a dar respuesta a los problemas ambientales.

Las entrevistas realizadas han sido una ventana hacia los conocimientos de la comunidad del Valle del Bolsón y su conexión con la tierra. A través de la participación activa de los pobladores, se obtuvo información valiosa para abordar las problemáticas del cambio climático que afectan directamente a la comunidad. El compromiso como investigadoras es difundir estas experiencias y conocimientos, fomentando políticas públicas que promuevan la conservación ambiental. Sólo trabajando juntos y conectando con la tierra, es posible enfrentar el desafío global del cambio climático y garantizar un futuro sostenible para las generaciones venideras.

Contactos:

Pamela Villagra pamelavillagra109@gmail.com
Ángeles Molina Pico molinapicoangeles@gmail.com
Ana Soledad Meléndez solemelendez@gmail.com